Señor director:
Deseo sumarme a la extrañeza y crítica de muchos, ante la contratación del fiscal Alejandro Peña para un cargo en el Ministerio del Interior, por estimar que se trató de una operación poco decorosa y que pone en dudas la independencia del Ministerio Público frente al gobierno.
Estimo que en el llamado "caso bombas," el fiscal Peña ha actuado desproporcionadamente encarcelando a 15 jóvenes por el testimonio de testigos protegidos y ahora pidiendo presidio perpetuo para dos de ellos, tratándose de delitos contra la propiedad. Una razón más para derogar la llamada Ley Antiterrorista.
Estos jóvenes que, en su mayoría se encuentran en huelga de hambre, piden que se les juzgue en vez de ser mantenidos en prisión preventiva en condiciones violatorias de los derechos humanos. Es evidente que la acción del fiscal Peña responde a la intervención que hizo el ministro del Interior en junio pasado y que significó la salida del caso del fiscal Xavier Armendáriz. Todo lo cual pone en duda la independencia de la Justicia. Por todo esto, me parece que la contratación del fiscal Peña por parte del Ministerio el Interior es una señal muy equivocada.
Pbro. Alfonso Baeza Donoso
Ex Vicario Episcopal de Pastoral Obrera y Social
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